Por Merlin Velis
El Presidente de la República, Nayib Bukele, cumplió su primer año de gobierno el pasado 01 de junio y en poco tiempo ha pasado de tener empatía popular a recibir diversas críticas por sus acciones inconsultas y un discurso plagado de confrontación política.
Para la Coordinadora General de Las Dignas, América Romualdo, en el primer año de gobierno, se ha deteriorado la institucionalidad y se anuló la participación ciudadana para la creación de propuestas.
Pero, además se ha puesto en evidencia que hay mal manejo de la emergencia por Covid 19 y de los fenómenos climáticos que han azotado al país en los últimos días, una muestra de ello es que, hasta el 4 de junio, el gobierno informó que entra a la fase de evacuación preventiva, cuando ya el saldo de daños asciende a más 29 mil 968 familias, 27 personas fallecidas y 3 desaparecidas, según datos del Ministerio de Medio Ambiente, hasta las 14 horas de este 4 de junio 2020.
“El contexto de emergencia por la pandemia y por las lluvias nos hacen ver que el hecho de no tener planificación y haber desmontado mecanismos de proyección que se habían construido por años, dejan al descubierto que falta hacer un Plan Nacional para abordar este tipo de emergencias y disponer de los recursos necesarios de forma prudente, ya que los recursos no son ilimitados y realmente invertirlos en lo que la población necesita más”, sostiene Romualdo.
El desinterés a la violencia contra niñez, adolescencia y mujeres es otras de las grandes debilidades del gobierno en este primer año de gobierno, y la falta de prioridad en el uso de los fondos públicos en políticas dirigidas a las mujeres, señala la Coordinadora de Las Dignas.
“Para este caso de la tormenta hacemos un llamado a tomar en cuenta los lineamientos de enfoque de género para la atención de albergues y atención de ayudas humanitarias, porque si no las mujeres siempre van a quedar fuera de la protección y estando sometidas a mayor vulnerabilidad y a violencia contra ellas”, afirma.
Concluyó que en este primer año de gobierno se ha dejado en evidencia la debilidad en la institucionalidad pública al no poder liderar acuerdos y respetar las diferentes funciones de los órganos del Estado.
